NUEVA YORK.- Gilberto Santa Rosa confiesa que si hay algo de lo que se arrepiente, es de no haberse aplicado más en sus estudios musicales cuando era un “niño artista” en Puerto Rico.
“Yo fui a una escuela de música en Puerto Rico muy buena, pero yo estaba ya inmerso cantando con orquestas y entonces pues yo pasé mi escuela superior siendo un niño artista, era diferente la dinámica y yo hoy día me arrepiento”, dijo el Caballero de la Salsa en una entrevista con The Associated Press el jueves en Nueva York. “Debí atender un poco más la teoría y la cosa técnica de la música para yo poder aportar un poco más a mi trabajo más allá de mi instinto y de mi talento natural”.
Su talento natural, sin embargo, lo ha llevado lejos. El intérprete de éxitos como “Perdóname”, “Amor mío no te vayas” y “Vivir sin ella” celebra 40 años de trayectoria musical con “Gilberto Santa Rosa, 40… y contando”, un concierto grabado frente a una audiencia en vivo en el Coliseo José Miguel Agrelot en San Juan que se estrenaba el viernes por la noche por HBO Latino.
Santa Rosa dijo que este era un hito que lo llenaba de “una satisfacción muy grande, mucha alegría, y por qué no, mucho orgullo, … pues al principio uno ni se imagina, uno tiene todo el deseo del mundo pero ni se imagina que va a poder sobrevivir en la industria” y “llegué a 40 años cantando en una carrera tan competitiva y tan intensa”.
Las cuatro décadas las cuenta desde su primera experiencia en un estudio de grabación a los 14 años de edad, cuando se lanzó a grabar un vals peruano a ritmo de guaguancó que se tituló entonces “Los rosales”, aunque confiesa que no conoce el verdadero nombre del tema y que recientemente, cuando buscaron información editorial sobre el mismo, no la consiguieron.
Esa primera grabación, además, la recuerda como uno de los momento clave más satisfactorios por diversas razones.
“Cuando yo decidí tomar este camino como mi modo de vida, tomar en serio la música y seguir adelante, mi padre me dio esa bendición. Porque para cuando yo me criaba todavía quedaba el estigma ese de que los músicos y cantantes se morían de hambre, que eso era un trabajo incompleto, … y mi padre lejos de darme la espalda o desanimarme lo que hizo fue darme la bendición”, recordó.
Además, le permitió estar por primera vez en un ambiente profesional y compartir micrófono con un artista al que admiraba.
“Yo la fui a grabar ahí, un aficionado total entre un montón de profesionales, y lo grabé con un gran cantante de la época que se llamó Elliot Romero y cuando me tocó cantar con don Elliot me acuerdo que yo temblaba”, dijo. “En ese momento yo sentí que entré al mundo real de los profesionales porque aquel estudio era espantoso, pero a mí me parecía bellísimo porque era real. No era mi sueño ni mi idea, era (que) ya yo estaba metido en el asunto”.
“Gilberto Santa Rosa, 40… y contando” hace un recorrido por los primeros años del salsero y presenta éxitos que también incluyen “Conciencia”, “Que alguien me diga” y “Déjate querer”. Además de cantar, Santa Rosa toca múltiples instrumentos y comparte el escenario con invitados que incluyen a Luis Enrique, Víctor Manuelle, Tito Nieves y Vico C.
El espectáculo no solo se transmitirá por el canal de cable. También estará disponible en todas sus plataformas, incluyendo HBO GO, HBO NOW, canales de TV participantes y plataformas asociadas de transmisión, así como canales gratis On Demand.
Santa Rosa dijo que en los próximos años le gustaría producir más.
“Siempre he tenido una fascinación por la producción en general. He producido discos para otros amigos, he participado en producción de eventos y conceptualización de algunos conciertos y programas de televisión y discos también. Esa parte nunca se me ha quitado del todo”, manifestó.
Sobre el futuro de la salsa, espera que los medios de difusión le den a los nuevos salseros la oportunidad de conectar.
“Es como el huevo y la gallina: si no los suenan no los conocen, y no los suenan porque no los conocen, entonces todo se hace más difícil”, dijo. “El talento lo tienen, y están haciendo un buen trabajo, lo que necesitan es la disposición correcta para que el público conecte con ellos y sobre todo el público de su generación, porque ellos pueden complacer muy bien a los veteranos pero necesitamos que conecten con su generación porque eso es lo que les va a dar la durabilidad”.
Fuente: AP