POR MARIELA ALMANZAR.- La frialdad con que las personas actúan en los últimos tiempos, cada día me sorprende más porque la sociedad te exige algo y cuándo lo haces te juzgan.
Nos gustan que nos mientan aunque sabemos que es irreal.
Las grandes víctimas de todo esto somos las mujeres porque todo el día vivimos en la diana, listas para que la flecha haga su trabajo.
■-Nos quieren “naturales” pero no te atrevas a hacerlo; mejor hazte un maquillaje natural y engaña a todos con tu rostro orgánico.
■-Tienes que aceptar tu cuerpo, pero eso sí, que ni se te ocurra tener estrías, celulitis, chichos, espinillas, manchas, porque está satanizado. Mejor ahógate con una faja que te corte la respiración y como si fuera un secreto de estado métete cuchilla y hazte después par de vídeos en el gimnasio diciendo que todo el sacrificio vale la pena.
■-Pobre de ti si muestras tu pelo natural, porque NO está bien. Mejor córtate el tuyo y gasta tu sueldito comprando cabellos de la India para que luego parezcas una ciguapa y no puedas rascarte bien porque tienes más jorobas que los camellos.
■-Jamás de los jamases, repitas ropa, ufff… ¡Qué pecado!… y muchos menos admitas que algunas de ellas las compraste en una paca; porque todos tienen ropa de diseñador y reconozco que soy media tonta, ya que jamás he leído en las etiquetas que las ropas son desechables. Así qué deja de pagar tus deudas y comer bien, para llenar la gula de los demás y hacerte pasar por rico, aunque de puerta para dentro te esté llevando el carajo.
■- Y por último, pero no menos importante NEVER seas TÚ, no tengas ideas propias porque tienes que estar como un ganado, yendo por el camino que te indican sin rechistar y sé una muñequita SIN IMPERFECCIONES, TONTA, DEPENDIENTE y sobre todo ESCLAVA de la belleza.
LA AUTORA ES PERIODISTA