Lucir una piel joven y sana es una de las metas más habituales cuando se trata de belleza: una tez radiante es sinónimo de una apariencia más joven y saludable. Pero, si bien tenemos claro que la cosmética y las rutinas de cuidado facial son clave para lograrlo, se nos suele olvidar que la alimentación y los suplementos también son muy importantes.
Y es que la nutricosmética, para algunos todavía desconocida, va ganando terreno para ayudarnos a alimentar nuestra piel: descubre las vitaminas de la belleza y los ingredientes más importantes para lograrlo.
DIETA COSMÉTICA
Es posible que, al oír hablar sobre los beneficios de la nutrición para la piel, pensemos en la alimentación, y es que “una dieta equilibrada contribuirá a tener una piel sana y bien nutrida”, tal y como explica la doctora Paz Cerdá Escar, dermatóloga, en un artículo publicado en Doctología.
Sin embargo, si bien la alimentación es muy importante, la nutricosmética va más allá de nuestro menú diario: “Incluso en las mejores circunstancias, puede ser difícil alcanzar la dosis diaria adecuada de vitaminas y nutrientes con la dieta diaria habitual”, explica a la revista Semana la experta en cosmetología Raquel González, CEO de Perricane MD.
De acuerdo con la doctora Cerdá, “algunas técnicas culinarias, la manera de cocinar, y otras sustancias presentes en los alimentos pueden inhibir la acción de estos micronutrientes”.
Por ello, la recomendación de Raquel González es “tomar suplementos nutricionales específicos junto con una dieta equilibrada y antiinflamatoria, así como con los productos prescritos para cada piel. Es decir, aseguramos el consumo de compuestos fundamentales para la salud, el cuerpo y la piel”.
VITAMINAS Y OMEGAS
Pero, ¿qué tipo de suplementos debemos ingerir entonces? Dependiendo del organismo regulador, los criterios pueden variar pero, por ejemplo, los requisitos exigidos por la Unión Europea para los nutricosméticos son: seguridad, eficacia, tecnología, biodisponibilidad, tecnología, pureza y sinergia.
Para Estefanía Nieto, Cosmetóloga y Directora Técnica de Omorovicza, la clave está precisamente en la “biodisponibilidad”. Es decir “que incluyan combinaciones de ingredientes que el cuerpo absorba de manera fácil y efectiva”, explicaba a Semana.
Y, ¿qué ingredientes deben tener nuestros nutricosméticos? Para Elisabeth San Gregorio, directora técnica de Medik8 “los suplementos ricos en Omega 3, aportarán ácidos grasos a la piel, favoreciendo su función barrera”, según explicaba a la misma publicación.
Otros ingredientes interesantes son “principios como el ácido alfa lipoico o las vitaminas esenciales antioxidantes, para proteger el organismo, presentes en alimentos como el brócoli, las espinacas, las frambuesas o las fresas” dice San Gregorio.
Eso sí, no siempre es buena idea elegir por nuestra cuenta estos suplementos: “en los casos de pieles reactivas o sensibles, es mejor consultar a un especialista antes de consumir alguno, para así evitar cualquier reacción alérgica”, dice Paola Ramírez.
En la misma línea opina la doctora Paz Cerdá, “es importante valorar siempre cada caso individualmente bajo la supervisión de un especialista”. Ya que “los profesionales de la estética, a través de tratamientos específicos, pueden recetar algunos nutricósméticos para ayudar al paciente a obtener mejores resultados”.
SUPLEMENTACIÓN SOLAR
Y, aunque el verano está llegando a su fin, es conveniente recordar que esta suplementación no solo cuida nuestra belleza sino nuestra salud, ya que puede servirnos como protección solar para lucir un bronceado seguro.
“Es el caso de algunas píldoras para el sol que -según Clara Motos, experta en dermofarmacia y farmacéutica de DosFarma- prepara las células y refuerza la barrera de la piel contra el daño ocasionado por las radiaciones ultravioleta y los infrarrojos”, según recogía el diario El Español.
Además de la protección y los antioxidantes, algunos suplementos suelen incluir un ingrediente ideal si queremos ponernos morenos “los betacarotenos, que estimulan la melanina y favorecen un bronceado más rápido”, dice Motos.
Eso sí, a veces los suplementos hacen solo una de las funciones: proteger o broncear. Y, por si estaba pensando en dejarse el tubo de crema solar en casa, Motos señala que, en el caso de los primeros, “están pensados siempre como un complemento y no como un sustituto de la fotoprotección tópica”.
Por supuesto, protegerse del sol va más allá del verano: “se deberían de tomar (las pastillas) todos los días del año, al igual que lo hacemos con nuestra protección solar tópica”, insiste.+
Aunque si lo ven demasiado, “el tiempo de suplementación más recomendable es iniciar el tratamiento en los meses de la primavera, hasta principios del otoño”, recomienda la experta.
NORA CIFUENTES / EFE