No todas las pieles son iguales, eso está claro. Y cada tipo de piel requiere un cuidado específico. En este caso hablaremos de las pieles grasas. Aquí algunas preguntas y respuestas al respecto.
Frecuencia de limpieza: las pieles grasas deben limpiarse dos veces por día con limpiadores suaves, fluidos y de textura ligera que no contengan jabón. Usar productos con un pH controlado que no irriten ni resequen.
Exfoliación: no se recomienda más de una o dos veces por semana, dependiendo cómo reacciona la piel. Es un procedimiento de limpieza agresivo, que también puede irritar.
Poros dilatados: no pueden evitarse y son formaciones naturales. La limpieza adecuada y las exfoliaciones semanales contribuyen a mantenerlos limpios y a dar al cutis un aspecto terso y suave.
Cremas hidratantes: hay que elegir productos sin componentes grasos y se prefieren las cremas de textura suave, ligera y fluida.
Cremas anti-age: pueden usarse, siempre que sean emulsiones fluidos o serum que vehiculizan ingredientes anti edad, como por ejemplo el retinol, o el ácido hialurónico, entre otros.
Protección solar: todo tipo de piel tiene que tener protección solar para evitar el daño y el fotoenvejecimiento.