El azúcar es uno de los ingredientes principales en la repostería convencional. No sólo es usado para darle un sabor característico a cada preparación, sino también como un conservante natural.
Aunque mucho se comenta sobre el daño que puede causar a la salud, principalmente el azúcar refinada o blanca, como popularmente se conoce, eso no es una excusa para dejar de preparar esas deliciosas recetas que le endulzan el día a cualquiera.
Para los que no les gusta utilizar este ingrediente en ninguna de sus variables también existen endulzantes naturales que pueden servir de sustitutos, con menos calorías y mayor aporte nutricional, como la miel de abeja, jarabe de arce y azúcar de coco, preferiblemente en estado puro u orgánico.
Un endulzante muy utilizado, principalmente entre pacientes diabéticos, es la stevia, una planta con hojas que tienen el poder de endulzar de 10 a 30 veces más que el azúcar común.
Según expertos, es importante tratar de reducir el azúcar en el día a día ya que el consumo frecuente y abundante de endulzantes comerciales y productos azucarados, además de los dulces presentes en frutas, algunos vegetales, cereales y legumbres, está relacionado al desarrollo de enfermedades como diabetes, obesidad, hipertensión arterial y algunos tipos de cánceres.
Aparte de producir alteraciones metabólicas, gastrointestinales y cognitivas, el azúcar de mesa y la presente en varios alimentos produce sensaciones agradables al paladar y en ciertas zonas del cerebro relacionadas con el placer, la felicidad y el bienestar.
Este es uno de los motivos principales por los que muchas personas se sienten tan atraídas por todos los alimentos que la involucren.
Deshabituar el paladar y el cerebro de las preparaciones dulces toma tiempo y requiere fuerza de voluntad, pero poco a poco se pueden encontrar endulzantes naturales para cada plato, ya que dependiendo del que se utilice puede variar el sabor.
Así lo expresa la chef y psicóloga Cesarina Minier, quien desde hace poco tiempo desarrolla una propuesta bajo el nombre de MomsCakeRD, con el propósito de ofrecer al público repostería a base de frutas y vegetales, sin colorantes, conservantes ni sabores artificiales añadidos.
De acuerdo con Minier, lo ideal sería evitar los azúcares procesados y optar por los encontrados en la naturaleza. Una buena opción es saborizar los postres con frutas, por ejemplo: para una tarta o bizcocho se puede agregar manzana o pera rallada. Para los jugos con frutas dulces, como el mango, la piña o la lechosa, basta con licuar la pulpa de éstas con agua común o de coco y hielo. En el caso de los jugos con frutas cítricas como el tamarindo, limón o la chinola, es suficiente agregar más agua para necesitar menos endulzante.
Fuente: Laura Ortiz