En el mundo del fitness es casi imposible no escuchar consejos para estar en forma, pero la mayoría carece de fundamento científico.
Por lo regular cuando se empieza una rutina de ejercicios en el gimnasio, cada quien lleva consigo sus creencias de cómo se debe ejercitar, sin embargo, la mayoría de estas ideas resultan ser erróneas. Estas a pesar de carecer de un fundamento científico son aceptadas como buenas y válidas por quienes no cuestionan las informaciones recibidas por parte de inexpertos, y se guían de ellas para iniciar su jornada de entrenamiento sin pensar en futuros daños, entre ellos, las lesiones, explica el entrenador personal César Yanez.
“Es mejor hacer ejercicios con el estómago vacío”, “cuanto más ejercicios se haga, más rápido se observarán los resultados”, “sin dolor no hay ganancia muscular”, “las bebidas deportivas son las mejores para hidratarse”, son algunas de las informaciones que circulan en el mundo fitness, y es por ello, que es importante aclarar cuáles son las realidades de esos mitos, destaca el entrenador.
“Cuando las personas comienzan a hacer ejercicios descubren que no solo se trata de ponerse ropa deportiva y entrenar, sino que además están expuestos al bombardeo de opiniones de aquellos que se consideran expertos”, manifiesta.
Es importante que quienes inicien a ejercitarse, lo hagan de forma progresiva. La intensidad y la carga deben ser determinadas de forma individual, porque dependen de la condición física de cada persona, de ahí la importancia de buscar a un experto en el área para entrenar, indica Yanez.
Para evitar caer en algunos errores a la hora de practicar ejercicios , Yanez enumera algunos mitos vigentes, entre los que se encuentran:
1. El mejor momento para realizar ejercicio es en la mañana
Aunque existen estudios que sugieren que realizar ejercicio físico a primera hora de la mañana puede ser más efectivo a la hora de perder peso, hay especialistas que aseguran que esto es solo un mito, ya que aseguran que el mejor momento para hacer ejercicio es aquel en el cual se pueda realizar de forma consciente y pueda convertirse en un hábito. No importa que sea en la mañana, tarde o noche.
2. Los abdominales reducen el exceso de grasa
Los abdominales desarrollan la musculatura abdominal, pero eso no quiere decir que ayuden a reducir la grasa. La presencia de grasa abdominal, que se acumula entre las capas profundas de la piel y el tejido muscular, solo puede atacarse con programas de entrenamiento orientados a la pérdida de grasa (trabajo cardiovascular). De ahí, que para obtener una reducción de volumen y un abdomen tonificado sea necesario un trabajo conjunto tanto de tonificación abdominal como de entrenamiento cardiovascular. Siguiendo una alimentación controlada en calorías, y practicando por lo menos 30 minutos de ejercicios al día se pueden conseguir buenos resultados en poco tiempo.
3. Las bebidas deportivas son buenas para rehidratarse
Aunque el marketing alimentario afirma que una bebida deportiva es mejor que el agua para la rehidratación, la realidad es que estas bebidas son una fuente de azúcar y agua. En su lugar, los expertos recomiendan usar tan solo agua para la rehidratación, y consumir alimentos con alto contenido proteico tras un entrenamiento, ya que estas benefician al crecimiento muscular.
4. Hay que entrenar en exceso para estar en forma
Si crees que mudarte al gimnasio te hará una persona fit, estás equivocado. Tampoco es necesario hacer cientos de repeticiones para tener buenos resultados. Para lograr un cuerpo atlético y tonificado se requiere de un programa de entrenamiento regular y específico. Según los científicos, media hora de ejercicio diario es más eficaz para perder peso que entrenar durante horas.
5. Es necesario ingerir muchos carbohidratos y proteínas
Lo primero es que no hay una dieta perfecta para hacer ejercicio. La fórmula de 60 % de carbohidratos, 20 % de grasas y 20 % de proteínas es la más recomendada por los especialistas, pero estas cifras no se pueden tomar como algo absoluto. Esa receta puede que sea la ideal para un individuo, pero para otro le puede convenir la de 40-30-30.
6. Sudar hace perder peso
Sudar forma parte de la vida diaria, pero los niveles de sudoración varían dependiendo de cada persona. Para los expertos, no siempre que se suda significa que uno está haciendo el ejercicio de la manera correcta. Tampoco quiere decir que se esté adelgazando, ya que en términos prácticos, solo se pierde agua. La sudoración no es un proceso que gaste suficiente energía para hacer perder peso consistente o adelgazar.
7. Es importante estirar antes de hacer ejercicio
Es recomendable, pero no es crucial y depende de la intensidad con la que se vaya a hacer el ejercicio. También hay que tomar en cuenta el tipo de estiramiento que se realiza, ya que hay algunos que son mejores para antes de que se realice la actividad física y otros para después.
Para el calentamiento se recomiendan los estiramientos dinámicos, que implican mayor actividad muscular, mayor coordinación y mayor agilidad, mientras que para después son los estáticos, en el que hay apenas actividad muscular y articular, por lo que se reduce la tensión y se relaja más el músculo.
8. Usar un plástico en el abdomen ayuda a quemar grasa
El deporte ha tenido a lo largo de los años muchos trucos y técnicas para mejorar los resultados, entre ellas el de envolverse una funda plástica en el estómago para quemar grasa, sin embargo, lo que se produce es un aumento de la temperatura porque no permite una transpiración, y es por ello, que se pierde líquido y produce deshidratación. Esta creencia no es para nada efectiva, y por lo tanto no es recomendable llevarla a la práctica en ninguno de los casos, pues los daños son mayores que los beneficios. Lo ideal es siempre utilizar prendas que permitan la traspiración, puesto que si practicas deporte y mantienes una dieta sana lograrás eliminar las grasas y las calorías que te sobran, sin la necesidad de recurrir a este tipo de técnicas.
9. Sin dolor no hay ganancia muscular
No es cierto. Lo que podría suceder es que si siente dolor durante el ejercicio esté a punto de sufrir una lesión por no realizarlo correctamente, o ponerle demasiada intensidad al entrenamiento. Hay que realizar el ejercicio físico, con calma y de manera correcta para evitar lesiones.
Fuente: Giorgi Salvador Almonte