Los antojos en las mujeres embarazadas son algo muy común. Se pueden dar por varios motivos.
Cambios hormonales: pueden tener un gran impacto en los sentidos del gusto y el olfato, lo que provocaría los repentinos y fuertes antojos.
Necesidad nutricional: médicos y nutricionistas creen que están directamente relacionados con los nutrientes que el cuerpo está necesitando durante la gestación.
Antojos dulces: puede que se tenga una carencia de magnesio, cromo y agua. Para no recurrir tanto a los alimentos chatarra, se recomienda sustituir estos antojos con frutas.
Chocolates: es uno de los más comunes y se cree que es señal de que al cuerpo le hace falta magnesio, cromo y vitaminas del complejo B.
Salados: indica que, además de fibra, el cuerpo necesita agua y electrolitos. Estos nutrientes se encuentran también en las verduras. Por otra parte, también se podría deber a un exceso de estrés, en este caso lo recomendable es buscar la forma de relajarse.
Queso: significa que a tu cuerpo le hace falta omega 3. Además del queso, también podrás encontrarlo en alimentos como el salmón o las nueces.