Según Regina E. Pérez Lama, psicóloga clínica, para educar los hijos en la era digital, los padres deben informarse sobre cuáles son las edades adecuadas en la que ellos pueden manejar aparatos tecnológicos, siempre respetando las necesidades de desarrollo y crecimiento en cada etapa de sus vidas.
A pesar de que las nuevas generaciones tienen a su alcance entretenimiento e información en Internet, los padres tienen el deber de orientar sobre ello. El uso de la tecnología no debería ser lo único que el niño realice para entretenerse. Debería existir un mundo fuera del digital donde los más pequeños aprendan a interactuar con la naturaleza y con otros niños. Para este tema la psicóloga Regina E. Pérez Lama, psicóloga clínica y de infanto-juvenil, respondió a las siguientes interrogantes:
¿Cómo se puede educar a los niños en la era digital?
Las nuevas generaciones están naciendo en la era digital. Lo asumen como algo normal y natural en sus vidas. Como padres debemos informarnos sobre las edades adecuadas en que ellos pueden usarlas, respetando las necesidades de desarrollo y crecimiento de nuestros hijos en cada etapa de sus vidas.
¿Cuándo es recomendable regalarles aparatos tecnológicos?
Nunca antes de los tres años y, a partir de ahí, regalarles aquellos aparatos que sean apropiados para su edad, los cuales deben usar bajo supervisión. Hay que procurar que el tiempo de uso no pase de una hora al día.
¿Cuál es el rol de los padres ante esta situación?
Los padres debemos aceptar que el uso de la tecnología y dispositivos es imparable; nuestros hijos buscarán la forma de acceder a ella estemos o no de acuerdo. Por eso es importante que nuestro rol sea de guías, formadores, maestros, lo que marcará los límites.
¿Por qué un niño puede llegar a ser adicto a las tecnologías?
Por falta de supervisión, reglas claras y seguimiento de éstas en el entorno familiar. Los padres debemos dejar claro en el niño, quién pone las reglas y cómo se debe responder a ellas. Un niño no tiene la capacidad de discernir lo que es bueno para él o no. Nosotros los adultos somos los responsables, por lo que debemos ser constantes en la aplicación de estas decisiones. Un infante necesita una estructura creada por sus padres o tutores para garantizar el sano desarrollo de su hijo en diversos aspectos: físico, emocional, y en valores familiares. Así como propiciarle la práctica de deportes, actividades al aire libre, desarrollo artístico y cultura; lectura, responsabilidad académica, aprendizajes alternativos como nadar, y/o un segundo idioma, etc.
¿Cuáles son las consecuencias?
Las consecuencias de una falta de supervisión en un niño que crece a merced de los diferentes medios digitales son: un niño con pocas habilidades sociales y encerrado en sí mismo; temeroso y solitario, lo que puede llegar a impedirle el desarrollo de las diversas actividades con las que debe cumplir, llevándolo a dormirse en clases, no presentar sus tareas o trabajos, lo que traería también como consecuencia un bajo desempeño académico.
¿Cómo los padres pueden prevenir este tipo de adicción?
Creando un horario diario de lo que el niño debe hacer todos los días y velar porque esto se cumpla a cabalidad. Asegurarse que estén teniendo herramientas para desarrollar las habilidades necesarias para su crecimiento y futura adultez. Los niños en edades hasta los 12 años no deberían estar solos durante el uso de tecnologías, deben ser constantemente supervisados.
¿Qué rol juega la confianza y la comunicación en la educación de ellos?
El fomento de la confianza y la comunicación abierta con nuestros hijos serán siempre nuestros mejores aliados. Decir “no y punto”, no es una opción factible para esta época, debemos explicarles las cosas, el por qué sí y el por qué no; ayudarles a respetar sus horarios, a fomentar la responsabilidad y el gusto por otras actividades no relacionadas a la tecnología. También expresarles que el internet es una puerta abierta al mundo, lo cual bien usado puede ser de beneficio para las personas, pero que hay quienes lo utilizan buscando dañar, engañar y dar informaciones falsas. Es bueno discutir los diferentes temas de actualidad con ellos, observar lo que hacen, supervisar sus fuentes de contactos y bloquearles accesos a páginas que no son apropiadas o que pueden llevarles a un enlace inadecuado.
¿Qué tan importante es buscar ayuda profesional cuando un padre detecta que su hijo tiene una adicción?
Lo más importante ante una situación como esta es buscar ayuda de profesionales que puedan intervenir asertivamente y ayuden a fortalecer las herramientas para que nuestros hijos rompan con el apego a la tecnología.
Fuente: Jessica Bonifacio / El Caribe